Si eres un profesional reflexivo (de cualquier ámbito), preocupado por la calidad de tu trabajo, si reflexionas continuamente sobre los métodos que empleas, analizas y cuestionas tu trabajo con el objetivo de mejorar día a día y buscar soluciones a problemas que van surgiendo en la práctica.
Si te preocupa tu propio funcionamiento interno. Si en lo que necesitas hacer hincapié es en la revisión de tus emociones respecto a tu trabajo, fortalecer tu autoconocimiento y apoyo emocional.
Puedes emplear la supervisión como apoyo a tu propio proceso, aporta eficacia laboral y te ayuda a optimizar tus capacidades. Te invito a identificar lo que funciona y repetirlo aprendiendo a dejar de lado las ideas y prácticas que no han sido útiles.
Supervisión es desarrollo profesional. Supervisión es mirar desde fuera ampliando las posibilidades. Podemos abordarlo individualmente o en grupo. Tú eliges.